La fotografía de retrato es 10% fotografía y 90% psicología y conocimiento del alma humana.

En el caso del retrato artístico, se busca la luz, el instante fugaz, el encuadre perfecto…

En el retrato terapéutico o en la retratoterapia lo que se busca es más bien algo que tiene que ver con ver el alma, con la esencia, con la luz propia, el brillo de ojos y el gesto que se escapa en el roce de la piel…que revela y rebela esa parte de las personas que no solemos ver.

Durante las sesiones se trabaja con la persona a un nivel profundo para que sus emociones, su esencia, su belleza única queden plasmadas en una fotografía. También se pueden hacer sesiones con parejas y pequeños grupos, que aportan diferentes perspectivas de nuestras relaciones.

Las sesiones van divididas en módulos, que combinan sesión fotográfica, visionado de imágenes, entrevista personalizada, análisis de las fotografías y dinámica grupal en el caso de grupos. Durante el proceso, se propondrán ejercicios fotográficos que ayudarán a la expresión y comprensión a través de las imágenes. La combinación de diferentes técnicas hace de esta experiencia fotográfica un auténtico viaje de autodescubrimiento, intimista, revelador y transformador donde cada mujer podrá verse con unos nuevos ojos en una nueva versión de sí misma.

​Al final de cada sesión se le entregan sus retratos para que siga profundizando en ellos y para que no vuelvan a esconderlos en un cajón.

¿Te apuntas a verte y disfrutarte a través de una sesión de REVELARTE RETRATOTERAPIA?